Valentina Nappi es una pornstar italiana nacida en 1990. Se inició en el cine porno tras contactar con Rocco Sifreddi en 2012. Desde las primeras escenas, demostró una entrega y unas maneras excelsas para el sexo delante de las cámaras. Su desempeño en escena fue brillante, muy lejos de la típica actriz que entra al porno para rodar unas pocas escenas.
El porno no es juego
Para ella, el porno no es juego, dar placer es algo muy serio. Valentina Nappi no quería ser una actriz porno más, ella quería ser una especialista en porno duro. Ofreciendo su ano desde el principio y mamando como una verdadera profesional. Respondió a las primeras orgías como una ninfómana adicta al sexo, con una actitud desafiante, impropia, de una actriz primeriza. Sin miedo a equivocarnos, fue uno de los mejores debuts de toda la historia, muy pocas veces hemos visto algo igual. Hasta sus compañeros de escena parecían sorprendidos, de seguro, ya en aquel entonces, sabían que esa chica llegaría muy lejos.
En esas primeras películas lucía de forma diferente, las hizo antes de someterse a una cirugía de nariz, y muy probablemente algún que otro retoque más, que le dejó la cara de muñeca que podemos ver ahora. Puede que no sea la más guapa, pero tiene uno de los mejores cuerpos naturales de la industria. Mención especial a su culo, rico y carnoso, casi perfecto, tanto en forma como en tamaño.
La pornstar intelectual
Se ha sabido adaptar a los nuevos tiempos, está monetizando su carrera a la perfección. Todo ese fuerzo para labrarse un nombre en la industria no podía quedar en saco roto. Es una adicta a las redes sociales, las tiene todas, como puedes ver en los enlaces de aquí abajo.
En el Italia se la conoce con el sobrenombre de la pornstar intelectual. Está graduada en Escuela del Arte y ha publicado varios ensayos sobre filosofía acerca de la condición del hombre en la sociedad contemporánea. Participa de forma habitual en el festival de filosofía italiano Popsophia. En 2013 publicó un polémico vídeo en YouTube, que finalmente sería censurado, en el que aparecía mostrando su opinión acerca del feminismo moderno.
Lucho por la igualdad de género, la verdadera igualdad de género. Lucho contra cierto tipo de feminismo que quiere culpar a los hombres y castigarlos cuando tienen impulsos masculinos normales. Es una locura que muchos hombres me escriban temerosos porque están excitados. A estas alturas todos se ponen en contacto contigo diciendo ‘lo siento’. Tienen miedo de ser señalados como maníacos. Para mí esto es violencia de género. Las feministas deben vivir su vida, son como esos cristianos que piensan que las mujeres son todas unas zorras, lo suyo no es más que otro tipo de represión sexual.
Foto tomada por Glenn Francis en la Expo AVN 2016 / CC BY
Última actualización: 17/02/2023